martes, 19 de mayo de 2009

LA CARA DEL PARO

Esta mañana cuando salía de entrenar del gimnasio al que acudo todas las mañanas, me he cruzado con un buen grupo de hombres y de mujeres que guardaban cola en la oficina del SEF de ronda Norte en Murcia. Mi mirada se ha detenido por un instante en un señor de unos cincuenta años, con camisa de cuadros de manga corta y pantalón oscuro que esperaba su turno para entrar a la oficina del SEF.

Nos hemos cruzado la mirada y no he podido más que detectar tristeza en sus ojos. Este señor iba con una carpeta de cartón azul sujeta de la mano derecha como guardando lo más importante que tiene en ese momento, que no es más que papeles y más papeles.

Todo el día he estado pensando en ese hombre y en todos aquellos hombres y mujeres en paro que no vemos. Me he imaginado que no haría mucho ese hombre acudía a trabajar para mantener a su familia, que probablemente se incorporó desde muy joven al mundo laboral, que habrá dedicado gran parte de su vida a la empresa que le pagaba hasta el momento del despido.

He visto en ese hombre la incertidumbre por no saber qué hacer y desconocer qué le deparará el mañana. La verdad que esta crisis global de grandes cifras macroeconómicas tiene su lado más humano en los ojos que he visto esta mañana y que aún a estas horas no he sido capaz de olvidar.

Por un instante, me doy cuenta de lo afortunado que soy por tener un trabajo fijo, por saber que cada mes cobraré mi nómina y por poder dormir con la tranquilidad de que no voy a perder mi puesto de trabajo. Es muy injusto las veces que podemos llegar a lamentarnos de lo cansados que estamos, de que si trabajamos mucho, de que apenas tenemos tiempo libre… pero esta mañana he visto en ese hombre de la camisa a cuadros y pantalón oscuro, la verdadera cara del paro.

Ojalá esto pase pronto, que nunca perdamos la esperanza.


1 comentario:

Presen dijo...

conmovedor....